Los cambios se producen en espacios poco considerados para ello. En este caso Miguel Pichetto se opuso a la decisión presidencial en cuanto a que el dólar baje y quede en los $1000. El legislador advirtió que el sistema de bandas no funciona, agregando que en esa modalidad siempre se mira al techo y no al piso. Definición que señala a los grandes empresarios que suelen manejar los mercados de cualquier índole, sin dejar fuera el poder verdadero en un país, más allá de las autoridades naturales. Conclusión devenida de los respectivos comentarios en ese sentido, que en sus momentos hicieron Raúl Alfonsín y Cristina Fernández.
Respecto de las expresiones de Pichetto, hay que tener en cuenta que no es la primera vez que ensaya una crítica al presidente Milei. No obstante hay que tener presente que estamos en un proceso preelectoral hacia la renovación de bancas en el Congreso Nacional, y ello, suele ser, como en otras elecciones, motivo de algunos tironeos para intentar ganar espacio inter partidario y que la opinión pública, no olvide a los personajes en puja.
Sin entrar en detalles puede decirse que Pichetto es opositor por su pasado peronista pero, también lo vimos criticando y luego votando proyectos del Poder Ejecutivo cuyos efectos conocemos y en casos padecemos. También estuvo en el sector de Macri y por ello, las advertencias sobre su posición política de corte conservadora. Ver los antecedentes de sus actuaciones en el Congreso Nacional; y recordar que estaba relacionado con el Partido Nacionalista Constitucional UNIR, considerado de corte “conservador”.
Son cambios suficientes para tomar ciertos recaudos ante las críticas expresadas que luego, fueran olvidadas para lograr espacios destacados en su larga historia política. En definitiva en este pasaje pretendidamente ilustrativo; lo del peronismo en el proceder del experimentado dirigente; fue ejemplo de una mutación progresiva.
Claro que es lo que han hecho otros dirigentes que en conjunto, colaboran para el descrédito de la concepción política del común denominador, que en los últimos años sufrió demasiado.
Si a esto le agregamos que los respectivos dirigentes cambian la bandera por gallardetes, es consecuencia en el resultado de elecciones a favor de lo que ya sabían que produciría, ensayando memoria. Aún así, el voto es una herramienta de apoyo o castigo a los postulantes que los han confundido, engañado y de hecho dañado.
