Neuquén Patagonia - República Argentina
Fecha de inicio 28 de abril de 2006

Reacciones

No me vengan a “sicopatear” porque si insisten me pongo más “sicópata”. Palabras del presidente de la Nación, Javier Milei, en clara amenaza que al margen de la puja con Mauricio Macri, está advirtiendo que va rumbo a una dictadura del estado de ánimo.

Valga la experiencia de lo inservible de haber regalado el PRO a Milei y equipo, para una vez más aprender sobre el alto costo de entregar la ropa interior a cambio de algún negocio. Ni un kiosco le dieron tal hicieron con los radicales que en su momento entregaron su reducida honorabilidad. Ejemplo del efecto es que en la elección porteña no figuraron. Y además, no equivocarse con la pérdida de inserción del PRO y menos con creer que Macri es una victima que perdió y hay que apoyarlo.

Macri fue un verdugo deshumanizado junto a Peña y otros que nos llevaron de nuevo a la dependencia con el FMI. No olvidemos que había que enamorarse de Cristina Lagarde y que ya entonces ese Fondo era distinto, según decían, tal como lo repitió Luis Caputo en esta nueva etapa de entrega de la soberanía económica y política, encabezada por Milei.

Y si no lo creen veamos lo que han hecho en este escaso año y medio y lo que prometen apurar, por ejemplo, con reformas laborales que incluyen viejas recetas lustradas para que el trabajador cada vez tenga menos derechos y mayores temores. Ya lo hicieron con las AFJP y ahora irán por el fin de la indemnización, que si no la paga el trabajador terminará sin nada a partir de la pérdida del lugar de trabajo. Vamos camino a una mayor importación y menor producción.

Compralo hecho con menos costos y vendelo para lograr mayores ganancias, mediando la desocupación. Ojalá me equivoque pero pinta de ese modo y no genera esperanza sino más incertidumbre.

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