Cumpliendo con el beneficio de la prisión domiciliaria aún si acreditar los 70 años, Edgardo Kueider y su compañera, secretaria o novia, Iara Guinsel Costa, consideran que su detención es anómala y que él al menos, es “inocente”.
Buscando justificar su opinión sobre la situación menciona a la expresidenta Cristina Fernández y critica a la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado.
Alega que se trata de una investigación sospechosa y reitera que los U$S 200000 no son de él y pertenecen a terceros por los que Guinsel intermediaba. Fue un dinero que no declararon porque no tenían cómo hacerlo y si era de terceros y ella lo portaba, en el mismo vehículo que el exsenador, ambos están comprometidos. Ya no importa de quién es el dinero sino por qué lo tenían ellos y allí está la razón del juicio en Paraguay.
Ampliando la info se agrega lo manifestado por Kueider sobre los U$S 200000, “No son míos, ni siquiera son de mi acompañante. Son de operaciones que ella estaba haciendo en Paraguay, de intermediación. Entramos y salimos de Paraguay esa noche. Eso está declarado, incluso está en la declaración inmediata que hicimos voluntariamente desde el primer día, está en el expediente, está en investigación”. Lo acertado hubiera sido que lo declararan antes y no tras que los descubran. De todos modos en ese supuesto, el portar semejante cifra hubiera tenido el mismo efecto por el cual ahora esperan el juicio oral por contrabando de dinero.
Resta la situación en Argentina por la que la jueza Arroyo solicitó un apena de 14 años acusándolo de lavado de activos que supone provenientes del pago de coimas relacionadas con contratos del Estado; según el expediente de la causa Securitas que incluye a la empresa distribuidora de energía de la provincia de Entre Ríos.
Lo concreto es que no es que Kueider no quiera salir del Paraguay sino que previamente debe enfrentar el juicio oral referido y si logra volver a la argentina, tendrá también que hacer lo propio en la causa que conduce la jueza Federal Arroyo Salgado. Incluso si sale libre de culpa en el Paraguay habrá que ver si cumple con el traslado obligado a la Argentina.