Mientras que las provincias representadas por sus máximas autoridades habían solicitado la distribución automática, de ciertos rubros para compensar las pérdidas impuestas por el gobierno de Javier Milei, se llevó a cabo otra reunión entre ministros de Economía provinciales con el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, según lo dispuesto por el ministro Luis Caputo, en base al Consejo de Responsabilidad Fiscal, que cambió la tónica a partir de la disconformidad planteada desde las provincias y la jefatura de gobierno de la ciudad de Buenos Aires.
Tras el encuentro las versiones de algunos de los funcionarios el resultado fue negativo y prevaleció el rechazo de la administración central respecto de lo solicitado, alegando que la iniciativa “afecta el resultado fiscal”, en razón de que “son fondos que se están ejecutando” (?).
Sobre este aspecto uno de los representantes provinciales aseveró que “Están generando superávit con plata de las provincias”. Referencia que ratifica la tantas veces negada situación de equilibrio que tanto Milei como Caputo reiteran como logro ejemplar, pero sin citar que han dejado de pagar para retener partidas con las que exhiben el falso superávit.
Ampliando algunas versiones surge la aclaración que “Quedó muy claro que (Guberman) fue a ratificar a los ministros lo que le dijo a los gobernadores. No van a aceptar nada que implique salirse del equilibrio fiscal. No hubo ninguna propuesta o contrapropuesta fehaciente”.
Asimismo otro de los voceros reiteró que el pedido de los gobernadores no contradice “el equilibrio fiscal, porque los ATN son recursos que vienen de la masa coparticipable y tienen de destino a las provincias. Sí se visualiza que el Estado nacional no distribuye los ATN, lo que está contabilizando es un superávit por el retraso del envío a las provincias. Por lo tanto, están generando un superávit con plata de las provincias”.
En un clima de indisimulada desazón agregaron que “Vinimos a cumplir una agenda del Consejo de Responsabilidad Fiscal. Los gobernadores en consenso manifestaron en su momento de avanzar con esto”, referido alproyecto de Ley con destino al Congreso Nacional.
A todo esto desde el ministerio de Economía emitieron un escrito destacando que existiría “la posibilidad de transferir recursos y gastos a las provincias” en tanto que “el Gobierno Nacional tiene equilibrio financiero y otro tipo de transferencia de recursos implicaría entrar en déficit. El Gobierno propuso la transferencia de las obras viales junto al financiamiento pertinente siempre y cuando esté acompañada de la responsabilidad de la ejecución de las obras”. Paradójica observación porque los primeros en suspender dichas fueron las autoridades del gobierno nacional, a lo que desde las provincias solicitaron que se les transfieran las autorizaciones para trabajar en las rutas nacionales abandonadas sin medir diversas consecuencias
Guberman, comentó también que el gobierno “está dispuesto a discutir un monto máximo a repartir de acuerdo a los coeficientes de coparticipación. Se busca avanzar en todas las normas que establecen asignaciones específicas, como aquellas que estipulan pisos de gastos, y que el ámbito de diálogo entre las provincias, Ciudad y Nación que se está generando a partir de estas reuniones sería propicio para avanzar en este tipo de medidas estructurales”.
Comentario que resulta poco creíble ante los incumplimientos y decisiones negativas para las provincias. Habrá que ver que surge del análisis en cada provincia y las eventuales conversaciones que se renueven entre los gobernadores para decidir sobre la continuidad de los reclamos.