Pesan las realidades maquilladas y negadas de la situación económica y social en la Argentina, negociada con el Tesoro de los EEUU. Salvataje electoralista relámpago que usaron para nublar la visión del común denominador y que muchos crean que Milei era una garantía, gracias a unos U$S 2000 millones aportados por Scott Bessent, por orden de Trump.
El que luego del negociado, festejó el triunfo acotado de los libertarios fregándose las manos pensando en las negociaciones a su estilo, y beneficio de sus empresarios. La soberanía importa un carajo. La tiraron en el balcón del palo mayor para que nadie la vea y se olviden de ella.
Recuerdo al famoso mejor ministro de economía, para Milei claro, corresponsable de los mayores endeudamientos de los argentinos, con Macri y con Milei, que disfrutan libres gracias a ese gran poder convincente para esquivar la Ley. Poder que genera más deuda para sostener lo indemne ante la Justicia congelada, según el caso.
No sorprenderse ni ofenderse con la definición. Antes despacharon el oro de reserva sin dar explicaciones, y sin intervención judicial. Son económicamente convincentes buscando quien los vote y proteja. Escenario escandaloso sin olvidar el swap con China que este ministro no descarta a pesar de que los proveedores son los soretes comunistas según califica el presidente Milei, ufanándose en actos partidarios de la derecha internacional, usando fondos del Estado.
Abuso anarco capitalista que ayer criticó el inefable Domingo Cavallo; rescatando al Estado que él, Macri y Milei, critican y explotan. Agrego que Luis Caputo reconoció que Argentina no tiene fondos para pagar USD1.500 millones en 2025 y U$S20000 millones en 2026. Hay que avisarle a Caputo que Milei va en contra de Xi Jinping, que es quien autoriza ese swap, ya que el de Trump todavía no es realidad. No hay déficit cero ni equilibrio fiscal.
Hay deudas por todos lados y por eso, nos ajustan más cada día.
