Aunque Milei critique al animal submarino, está haciendo falta urgente una especie de pulpo para tapar (con sus 8 tentáculos) los agujeros que va dejando el ministro Luis Caputo. Vale reconocer que gran parte de culpa viene del gobierno de Macri pero, no olvidar que en ese tiempo, este Caputo, fue uno de los gestores para dicho endeudamiento.
Este mes de agosto será otro ejemplo del desastre que han provocado por lo vencimientos de deudas acumuladas por unos $23,01 billones para cubrir los papeles (lecaps) ofrecidos en esta rutina que lo único que renueva son las deudas impagables. La única ventaja que tienen hoy en el gobierno es que dichos vencimientos son en pesos ya que los dólares no están y esta deuda equivale a unos U$S17.500 millones.
En el medio el proceso de atracción para alejar a los inversores del dólar, con la oferta de altos porcentajes de beneficios. Otra vez se repite el círculo vicioso que incluye la falta de efectivo.
En simultáneo el BCRA había impuesto un encaje mayor para contener más circulante en las bóvedas bancarias y que la plaza se siga secando. Incluso evitando desvíos en la compra de divisas estadounidenses.
En este proceso el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, expresó, “Entiendo que la confusión se puede generar por incluir dentro de los vencimientos las Lecaps en poder del BCRA que se van refinanciando por fuera de las licitaciones a precios de mercado. La estrategia financiera del Tesoro seguirá siendo consistente con la política monetaria evitando excedentes de pesos. Esta estrategia financiera es inédita en el país y puede realizarse por la convicción y el compromiso del presidente Milei junto a su equipo de gobierno con el equilibrio fiscal”.
Una vez más el argumento incluye la mención de un superávit, que si lo confrontamos con la realidad económica y financiera concluimos en que no existe. Sino. no habría que estar viendo cómo cuernos se pagan los billones de deudas pesificadas.