Periodismo de Opinión
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Una encuesta e informe pertinente del Banco Interamericano de Desarrollo en América Latina y el Caribe, amplía el conocimiento sobre la grave situación de quienes asisten a personas mayores. Las que generalmente “sobrecargadas y mal pagadas” también padecen otros daños durante el desempeño del rol de “cuidadoras”. La atención de las autoridades del BID destaca la importancia del recurso humano garante de la buena calidad de los cuidados a futuro. Desde la entidad refieren desconocer aspectos puntuales de la profesión en cuanto a sus condiciones laborales y formación de estos cuidadores. Por ello se busca aumentar el conocimiento de la realidad de estas personas de las que se investigan mayores datos nuevos datos de quienes se desempeñan “remunerados y no remunerados en América Latina y el Caribe”. Situación que a priori permite agregar que no debe existir ningún trabajo sin remuneración, y de hecho, dignificado con la cuantificación y condiciones acordes a las funciones de asistencia a personas. La investigación referida data del año 2023 en adelante redactada en idioma inglés, portugués y español para 25 países; dio cuenta de la existencia en el caso de los remunerados, de una baja suma de dinero pagada tras la prestación del servicio, a lo que se suma el “abuso verbal (39%) o físico (14%); mientras que un tercio de estas personas no han tenido formación alguna sobre la actividad. La estadística emitida desde el BID exhibe que los cuidadores no remunerados corren igual o peor suerte, además de no recibir pago alguno por su servicio; permitiendo suponer una relación esclavizante. Asimismo los cuadros de depresión de los mencionados cuidadores llegan al 31% de los casos evaluados, mientras que el 44% debió abandonar la actividad por necesidades similares de familiares. La actividad del cuidado de personas mayores generalmente es desempeñada por mujeres que en estas condiciones evidencia la clara existencia de abusos reñidos con la “igualdad de género”. Tema éste que recientemente fuera descalificado por el ministro de Justicia de Argentina, Cúneo Libarona, en coincidencia con el criterio del presidente Javier Milei que no ha corregido estás declaraciones de un funcionario que debe como el resto del gabinete, respetar procesos sociales de carácter dignificador de las personas y sus profesiones o actividades de corte laboral. Un proceso evaluado que requiere, según el criterio de las autoridades del BID, la aplicación de “urgente de políticas para desarrollar habilidades y mejorar las condiciones laborales y el bienestar de los cuidadores, necesidad que se ve aún más acentuada por el rápido envejecimiento de la población en la región. Al arrojar luz sobre estos problemas críticos, este trabajo es relevante para el diseño e implementación de políticas de cuidados que mejoren el bienestar tanto de las personas mayores como de sus cuidadores”. 05 09 24 |
