Desde el mentado círculo rojo aunque discretamente, consideran que la gestión del presidente es casi inentanedible y peor aún cuando les dice que sean ellos, los empresarios, los que inviertan en lo que ya no atiende el Estado. La disconformidad se refleja en expresiones tales como que no invirtieron u$u 40 millones y luego debieron gastar U$S 500 millones en compras urgentes de gas transportado en barcos desde el exterior. Además desde el sector de gran poder económico agregaron que “Faltan medidas para el campo. Tenemos muchos visitantes inversores, pero están esperando ver qué hacemos nosotros”. 

Expresiones de uno de los inversores, al menos así lo refieren también voz baja; que apoyaron la campaña electoral. Se trató el propietario del hotel en el que Milei se alojó durante meses, Eduardo Elsztain, que tiene otros canales de generación de riquezas; reconoció la posibilidad de que lleguen algunas inversiones del exterior, que hoy están a la espera de la reactivación productiva en el país. Ante esta escena también refieren que tienen expectativa por la llegada de Federico Sturzenegger, del que se sabe cómo procedió en el pasado en los procesos de endeudamiento y quebranto del estado Nacional. 

No obstante también la queja señala la inaccesibilidad para dialogar con el presidente de la Nación, al que ven dedicado a los viajes por el mundo, por razones particulares no gubernamentales. Asimismo refieren estos empresarios que el Jefe de Gabinete Francos los recibió y le manifestaron su desagrado por el riesgo contra la industria nacional, de abrir las importaciones sufriendo el sector por la caída de “ventas y de productividad”. 

Otro de los funcionarios no muy bien visto es el ministro Luis Caputo que por meses postergó las audiencias solicitadas sin lograrse el encuentro para ellos, muy necesario. Los empresarios respaldan la versión demandante de “recursos suficientes, desde el Estado, a políticas para impulsar sectores industriales que reclaman apalancamiento”. 220624